Londres II
Estuve en Londres y no me dio tiempo a comprar flores, ni me llevé unas tazas que me gustaban mucho, ni sentí la necesidad de comparar con aquellas otras veces, ni me acordé de echar de menos.
Estuve en Londres y no me dio tiempo a comprar flores, ni me llevé unas tazas que me gustaban mucho, ni sentí la necesidad de comparar con aquellas otras veces, ni me acordé de echar de menos.